Dibujo: David Márquez y Stuart Immonen
Portada: Stuart Immonen
Recopila X-Men nº 7-9 (abril-mayo de 2013)
Lo mejor: La serie no avanza mucho que digamos, pero creo que es más interesante detenerse número a número en explorar la percepción que la Patrulla-X original tiene del mundo presente. Hay diálogos muy interesantes y se sugieren ideas también muy atractivas. Este episodio no me ha impactado tanto como los dos anteriores, pero la serie sigue siendo muy válida.
Lo peor: Por decir algo, los dibujos de David Márquez. Pero no por que lo haga mal, simplemente es que no es tan, tan bueno como Stuart Immonen. Por otra parte, el encuentro entre los dos Ángel y el combate con Hydra me ha aburrido un poco, sinceramente.
Puntuación: 7 sobre 10.
Después de X-Men nº 29, mi siguiente lectura es el tercer episodio de La nueva Patrulla-X. Como os podréis imaginar, no llevo las series al día, sino que a veces las compro con un mes y pico de retraso, pero bueno... Más o menos estoy siguiendo regularmente las colecciones a las que me enganché del movimiento Marvel Now! De todas esas series, La nueva Patrulla-X es la que espero con más ganas, tanto que me dan ganas de engancharme también a La imposible Patrulla-X, ya que allí se explora la revolución mutante por parte de Cíclope y los suyos. Seguramente tendré que hacerlo, pues al final de este comic parece que se cruzarán las dos colecciones... Pero no adelantemos acontecimientos.
Si lo pensamos bien, esto de los viajes en el tiempo y encontrarse con tu yo futuro no es nada original, precisamente: es como cuando Hulk viajaba al futuro y descubría que se había convertido en el Maestro, por ejemplo. La gracia está en que esta vez el "futuro" en cuestión es el presente y quienes viajan no son los personajes del presente, sino los del pasado. Y eso sí es muy original. Así es que tenemos a la Patrulla-X de 1964 en el año 2013 (muy interesante el artículo de Julián Clemente sobre la forma en que los autores interpretan el contexto pasado de los cómics) y... las cosas han cambiado mucho. Tal vez los lectores no nos damos cuenta porque llevamos años siguiendo las series, pero para los propios personajes debe ser un shock. Que Cíclope se encuentre con que su yo adulto ha matado a Charles Xavier, que ahora lidera un bando revolucionario de mutantes, que trabaja codo a codo con Magneto... Lo queramos o no, las historias de los años 60 eran muy inocentes con todo lo que vino después y mola ver a los chavalines de la Patrulla-X original alucinando con todo lo que descubren.
Como era de esperar, de los cinco miembros originales, Cíclope y Jean Grey son los que tienen más peso en el desarrollo de la historia. El pobre Hombre de Hielo anda un poco perdido y parece el recurso cómico. El Ángel goza de cierto protagonismo en este comic, mientras la Bestia pasa desapercibido. Y es que está claro que el principal interés recae en ver cómo las circunstancias afectan al futuro matrimonio Summers. Por ejemplo, se supone que Jean Grey no desarrolló sus poderes mutantes hasta pasado bastante tiempo, mientras que aquí ya ha progresado mucho... y eso da que pensar si veremos una Jean oscura. Algo similar pasa con Cíclope, que aquí recibe la visita de Mística y los sutiles consejos de esta siniestra mutante. Por cierto, fijémonos en el detalle de que Mística habla de Chales Xavier como si hubiesen sido amigos; supongo que por influencia de la película X-Men: First Class.
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